La gestión del presupuesto es un paso fundamental cuando se decide apostar online.
Una adecuada gestión del dinero permite realizar las apuestas con lucidez y firmeza, sin dejarse llevar por la prisa o el entusiasmo fácil, para minimizar las posibles pérdidas y quizás incluso optimizar las ganancias. Es cierto que no hay una forma segura de ganar en las apuestas, ni siquiera en las mejores casas de apuestas, pero saber ya cómo gastar y gestionar el dinero disponible es un paso adelante para realizar apuestas con previsión y táctica de juego.
Para ello, es necesario conocer algunos conceptos relacionados con la gestión del presupuesto, y saber aplicarlos a la hora de realizar apuestas en los eventos deportivos que las casas de apuestas ponen a disposición. A continuación, una serie de consejos útiles y un análisis en profundidad de las nociones de presupuesto, así como de su aplicación práctica por parte del apostante, con o sin experiencia.
El presupuesto: Cómo gestionarlo mejor
Antes de apostar hay que elegir la casa de apuestas pues esta acción afecta indirectamente a la gestión del presupuesto. Una buena casa de apuestas legal no sólo ofrece un gran calendario de eventos, sino también una variedad de bonos como el bono sin depósito, el bono de bienvenida o el reembolso de las pérdidas, desde el 30% hasta el 100%.
El uso de los bonos, pero también de las promociones temporales ayuda al apostante a gestionar su presupuesto de forma inteligente. Por ello, siempre es conveniente optar por una casa de apuestas con licencia DGOJ que, según el tipo de deporte o evento de interés, ofrezca una amplia y diversificada gama de promociones.
En este sentido, cabe añadir que antes de hacer clic en la promoción o bono, el usuario debe comprobar los términos y condiciones de la oferta en cuestión, prestando especial atención a la fecha de caducidad y a las apuestas válidas. También es muy importante comprobar si hay una apuesta mínima para que se desbloquee la bonificación, o si hay alguna restricción.
Si se decide apostar con regularidad, es importante distribuir el presupuesto disponible: para ello, es importante saber a qué eventos es mejor apostar. Consultar una lista de eventos programados y concretar los que interesan es una buena técnica, pero también indagar sobre los eventos en detalle para conocer el estado de forma del equipo y los posibles imprevistos.
Las tarjetas, las lesiones de los jugadores y el estado del terreno de juego pueden parecer factores que no influyen en la gestión del presupuesto, pero hay que tener en cuenta que estos factores son capaces de anular y dar la vuelta completamente a los pronósticos más seguros y, por tanto, también a los resultados esperados de las apuestas. La gestión del presupuesto también implica el control de lo inesperado. Por ello, se recomienda apostar por etapas, así como empezar con cuotas bajas, es decir, las que tienen mayor probabilidad de ganar.
Puede que este enfoque no genere una rentabilidad muy alta o ganancias instantáneas alucinantes, pero, especialmente para los apostantes menos experimentados, es una forma gradual y responsable de disfrutar de las apuestas online. Llevar una cuenta actualizada de las ganancias y pérdidas es otra práctica útil: de este modo, se puede optar por reinvertir cualquier ganancia, dejar de hacerlo o, mejor aún, revisar la estrategia de juego cuando se note que se está perdiendo demasiado.
Por último, la elección del método de pago y retirada también puede afectar al presupuesto final: de hecho, los tiempos de retirada y depósito varían de un sistema a otro, al igual que los costes de las comisiones. PayPal es uno de los métodos favoritos de los apostantes, porque es inmediato y sin costes adicionales de transacción.
Herramientas de gestión de fondos
El presupuesto es la suma que el apostador invierte y por lo tanto pone en riesgo, por lo que se parte de una idea genérica de capital -el presupuesto disponible- que debe repartirse en el tiempo. Una buena regla es no apostar más del 10% del presupuesto total disponible en un día. Las apuestas no deben ser forzadas y, si se pierde, es aconsejable revisar los planes estratégicos.
Hay varias teorías sobre la gestión del dinero: algunos aconsejan evitar las apuestas que superen el 5% del presupuesto total disponible, pero si se es un apostante inexperto, se recomienda bajar el umbral por debajo del 3%. Para todas las apuestas realizadas, se sugiere mantener una hoja de cálculo Excel que contenga una lista de gastos, ganancias, junto con un presupuesto semanal, mensual o anual.
Para los más expertos en tecnología, existen programas y aplicaciones de gestión de fondos para asegurarse de mantener los datos actualizados y llevar un control de los ingresos y los gastos. Entre los principales programas de gestión de fondos se encuentran "Money Manager", "Fast Budget", "Easy Expense Management" y "Monefy". De este modo, como las apuestas móviles están en auge, se tiene la oportunidad de mantener la hoja de cálculo siempre al día con el último evento.
La apuesta: Qué es y cómo se calcula
El staking es un método de apuesta basado en la confianza que el apostante deposita en su pronóstico, a partir del cual decide el presupuesto a invertir en un determinado evento. Según este enfoque, el presupuesto diario de las apuestas puede variar en función de la confianza depositada en el resultado previsto, por lo que puede superar ampliamente el umbral diario del 10%.
La apuesta se calcula en una escala numérica del 1 al 10, y la evaluación pasa por una serie de factores como el estado físico de los equipos y los jugadores individuales, las condiciones meteorológicas y del terreno, las lesiones, las tarjetas amarillas y/o las descalificaciones, etc. Hay que respetar la apuesta y mantener el excedente presupuestario.
En general, sin embargo, cualquier presupuesto establecido debe ser siempre respetado, y nunca restado de otras actividades de la vida diaria, en la perspectiva general de un juego consciente y responsable.